Si hay algo que destaca en la familia Jaguar, es que sus soluciones en coches acaparan todos los ámbitos. Incluso también el de las competiciones en Fórmula E. El Jaguar I-PACE eTROPHY compite con la marca de forma eléctrica. Tiene una altura excepcional, una increíble agilidad y una magnífica experiencia de conducción. Desde el concesionario Classic Cars, vamos a presentaros cuáles son algunas de sus características principales.
Datos básicos del Jaguar I-PACE eTROPHY
Si hablamos de su batería, este I‑PACE eTROPHY funciona exactamente con la misma batería de ion-litio de 90 kWh que el original I‑PACE. Su diseño y sus novedosos y futuristas sistemas térmicos garantizan una larga vida útil y con periodos prolongados de potencia máxima constante.
Y no solo esto, sino que el sistema de transmisión que ya tiene el I-PACE es modelo para este coche de carreras en Fórmula E. Con sus 294 kW, 400 CV y 696 Nm, es capaz de acelerar de 0 a 100km/h en 4,5 segundos escasos. Lo que supone todo un avance en tecnología punta automovilística.
El inversor de corriente del I‑PACE eTROPHY es prácticamente igual al del I‑PACE y es propio de los vehículos eléctricos. Lo que hace es tomar la corriente continua almacenada en el banco de baterías y la convierte en corriente alterna para alimentar el motor.
Otra de sus características es la ligera arquitectura de aluminio. Se ha modificado de forma leve el del Jaguar I-PACE original. De esta forma, se cumplirá con la normativa de la Federación Internacional del Automóvil como jaula antivuelco.
Por tanto, vemos pequeñas modificaciones del modelo original. Pero, por ende, es el mismo vehículo, lleno de potencia, diseño, comodidad, autonomía, y sostenibilidad.
Como ya os hemos contando en veces anteriores, el I-PACE es un vehículo 100 % eléctrico pero sin perder el ADN inconfundible de la marca. Un diseño que atrae todas las miradas y una conducción impresionante. Ya es el deportivo de cinco plazas más inteligente del mundo, ganador de un sinfín de premios.
